Cómo Superar Traumas del Pasado de Forma Rápida y Eficaz con Tapping

El artículo de hoy es muy importante. Es una de las herramientas prácticas más potentes que conozco hoy en día. Se trata de una manera muy eficaz de superar traumas del pasado con tapping.

Por un lado, muchos de nosotros tenemos traumas del pasado: situaciones dolorosas que vivimos hace tiempo y que siguen vivas en nuestro interior. Y son un peso que no nos dejan vivir tranquilos.

Pero además, la mayoría de personas tenemos más traumas de los que somos conscientes. La realidad es que todos los problemas de la vida tienen su origen en alguna experiencia dolorosa. Todos los problemas –timidez, inseguridad, miedo, enfermedades…– se forman a partir del dolor que sentimos en situaciones concretas de la vida.

Los traumas que se van produciendo en situaciones puntuales de la vida son los que van creando nuestros problemas. Y superarlos es la clave para poder vivir realmente en paz.

(En este artículo usaremos tapping para superar traumas. Si no conoces esta técnica, puedes descargarte un manual gratuito aquí. Verás que es muy fácil.)

Todos los Problemas Nacen con un Trauma del Pasado

Es importante entender bien que los problemas, sean del tipo que sean, siempre aparecen en nuestra vida como resultado de un trauma. Siempre.

Una determinada persona, por su genética y su forma de ser, puede tener más o menos predisposición a tener unos problemas u otros; pero no son los genes los que hacen que aparezcan los problemas. Los detonantes que hacen que se manifiesten los problemas son los traumas.

Por ejemplo, una persona puede tener un carácter que predispone a la timidez, pero no será tímido, ni sufrirá por ello, si en ningún momento de su vida vive ninguna situación dolorosa en su relación con los demás. En cambio, en el momento en que sufra algún trauma en el que se sienta desplazado o humillado, su timidez tomará forma.

Así que, sean cuales sean los problemas que te preocupan en tu vida, seguro que hay situaciones dolorosas de tu pasado relacionados con ellos.

(PD. Hay que añadir que algunos de estos traumas pueden no habernos sucedido a nosotros directamente, sino a nuestros antepasados. Recientemente he descubierto de primera mano las constelaciones familiares, y me ha sorprendido mucho hasta qué punto nos influye nuestra herencia familiar.

Esto lo complica un poco, porque puede que tengamos traumas que no conocemos heredados de nuestros padres y abuelos. Afortunadamente, terapias como las constelaciones familiares nos pueden ayudar a sacarlos a la luz. El ejercicio del artículo de hoy es muy potente, pero para poder usarlo necesitamos conocer el trauma en cuestión.)

Qué Tipo de Traumas se Pueden Tratar con Tapping

Para poder usar este ejercicio necesitamos identificar claramente una situación dolorosa que queramos superar. Es muy importante que esta situación sea un evento concreto que sucedió en un momento puntual del tiempo y que dejó una huella emocional en nuestro interior. No deben ser experiencias genéricas que se han ido dando en nuestra vida, sino eventos concretos.

Por ejemplo, estos casos no son eventos concretos:

• Mi padre me pegaba de pequeño.
• Los niños de mi clase se reían de mí.
• En mi casa teníamos muy poco dinero.
• Etc.

Esto son situaciones genéricas, no eventos específicos. Un evento concreto sería algo así:

• Un día concreto mi padre entró en mi habitación y me pegó.
• Un día concreto salí a la pizarra de clase, sucedió tal cosa y los niños se rieron de mí.
• Un día fui a comprar con mi madre y vi que no podía pagar la compra, y eso me dolió.

Para poder superar los traumas del pasado con tapping hay que identificar las situaciones concretas que los produjeron. Normalmente son situaciones muy específicas, cortas en el tiempo –de no más de dos o tres minutos de duración–, y que dejaron un profundo impacto en nosotros.

Cómo Superar Traumas del Pasado con Tapping

La necesidad de superar traumas del pasado puede darse por dos motivos básicos. El primero es que seamos conscientes de tener una experiencias pasada que no hemos superado, y que nos está afectando actualmente. Y el segundo es que tengamos un problema que queremos resolver –una enfermedad, un problema emocional, un problema de relaciones, etc. – y que busquemos los traumas del pasado que puede tener detrás.

En cualquier caso, al final tenemos una o varias situaciones concretas de nuestro pasado que queremos superar. Te recuerdo que es muy importante que sean situaciones muy específicas, no hechos genéricos. Si son varias, hay que tratarlas por separado.

Básicamente, el proceso consiste en recordar el evento en cuestión muy lentamente e ir tratando con tapping todas las emociones que vayamos sintiendo.

Es muy importante ir paso a paso. Cuando hago sesiones de tapping, esta es una de las cosas que veo que cuestan más. Normalmente, tendemos a recordar el evento muy rápidamente; con una o dos frases muy rápidas: mi padre entró y me pegó, me hice pis en clase y los niños se rieron, etc. Pero esta no es la manera correcta de hacerlo. Para que sea realmente efectivo, hay que hacerlo muy lentamente. Como si estuvieras contando una película fotograma a fotograma.

Te pongo un ejemplo, que siempre ayuda a verlo mejor. A continuación te muestro un diálogo imaginario entre un terapeuta y un paciente para tratar un trauma concreto. Si estás tú solo es lo mismo, simplemente tienes que hacerte las preguntas y responderlas tú mismo.

–Pregunta: Cuéntame qué pasó

–Respuesta: Mi padre me pegó.

–P: De acuerdo, pero vayamos paso a paso. ¿Tú qué estabas haciendo en ese momento?

–R: Estaba en mi habitación, y mi padre entró y me pegó.

–P: Es muy importante que vayamos muy lentamente, fijándonos en qué sientes en cada instante. Empieza recordando un momento en el que tu padre aún no ha venido y tú estás bien.

–R: De acuerdo.

–P: ¿Qué estás haciendo?

–R: Estoy en mi habitación, jugando.

–P: ¿Te sientes bien?

–R: Sí, estoy tranquilo, jugando.

–P: Bien, ahora podemos avanzar un poco, pero muy lentamente. ¿Qué sucede a continuación?

–R: Oigo que mi padre me llama.

-P: ¿Y qué sientes?

–R: Estoy un poco intranquilo.

–P: ¿Por qué?

-R: No lo sé muy bien. Creo que noto que está enfadado.

-P: ¿Tienes miedo?

-R: Un poco sí.

-P: ¿De qué?

-R: No lo sé, de que se enfade supongo.

-P: ¿Tienes miedo de que te pegue?

-R: No, de que me pegue no.

-P: De acuerdo. Vamos a hacer una ronda ahora con la frase “tengo un poco de miedo”. Y mientras lo hacemos, es muy importante que te visualices a ti mismo en esa habitación justo después de que tu padre te llame, e intenta recordar lo que sentías exactamente.

En este punto hacen la primera ronda, porque es el primer punto donde la persona siente el primer malestar emocional debido a la situación. En este ejemplo vamos a suponer que la ronda es efectiva y que elimina ese miedo, pero en un caso real puede ser que no sea así. Si no se elimina, hay que continuar investigando por qué, y tratar lo que se descubra. No hay que avanzar en la historia hasta que se haya superado la etapa anterior.

-P: ¿Cómo estás?

-R: Bien.

-P: Imagínate que estás en la habitación, y oyes que tu padre te llama. ¿Aún sientes un poco de miedo?

-R: No, estoy tranquilo.

–P: ¿Y qué haces?

–R: Nada.

-P: ¿Respondes a tu padre?

-R: No.

-P: ¿Por qué?

-R: Porqué estoy jugando y no me gusta que me interrumpa, ni que lo haga llamándome con ese tono.

-P: ¿Estás enfadado?

-R: Sí, un poco sí.

-P: Muy bien, ahora haremos otra ronda con la frase “estoy un poco enfadado”. Igual que antes, durante la ronda visualiza el momento en que estás en la habitación, enfadado porque no te ha gustado cómo te ha llamado tu padre.

Aquí se vuelve a interrumpir el diálogo para hacer una segunda ronda. Es importante notar cómo ha cambiado la historia en muy poco tiempo. Primero estaba tranquilo, luego sintió un poco de miedo, y ahora está enfadado. Lo que parecía una situación muy rápida y simple (mi padre entró y me pegó) en realidad tiene varias etapas con diferentes emociones en cada etapa. Por esta razón es tan importante ir paso a paso. Hay que ir sanando cada emoción para sanar el trauma completamente.

Para no alargar demasiado el artículo, dejamos el ejemplo aquí, pero es posible imaginarnos un poco cómo continuaría: el padre entra en la habitación, dice algo, le pega, algo pasa después, etc. Para sanarlo, habría que ir recordándolo todo muy lentamente, parándose en cada cambio emocional para tratarlo.

En tu caso, si quieres tratar un trauma del pasado con tapping, el procedimiento es el mismo: coger el evento en cuestión e ir reviviéndolo muy lentamente. Es importante empezar en un punto de la historia donde aún estás bien e ir paso a paso sin saltarse ninguna etapa. Y siempre que haya algún movimiento emocional, párate para tratarlo.

Es una técnica muy poderosa; quizás una de las maneras más potentes de usar el tapping. Verás como puedes liberarte de los traumas que te  están limitando con relativa facilidad.

Y una persona sin traumas es una persona sin problemas.